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viernes, 9 de febrero de 2018

ERA SEGUNDA. CICLO SEGUNDO, FASE III: CRÓNICAS SOCIALES. Cap. 1



NUEVAS LEYENDAS DEL LAGO ATITLÁN

JORGE RUIZ CUESTA


http://i.creativecommons.org/l/by-nc-nd/3.0/nl/88x31.png
DESPERTAR SOÑANDO. S.A.
Atitlán,
Cerca del agua.








Emilio González Morales


ERA SEGUNDA

CICLO SEGUNDO



EXTRACTOS DEL “DIARIO DE UN VIAJERO”

de Jesús Miravalles

ÍNDICE 

FASE III

CRÓNICAS SOCIALES

1. La llegada de los turistas y el fin de las leyendas (por Andrés Alonso)
2. La nueva administración de las aguas
3. La aparición de los tuc tuc
4. Fotografías de un domingo en Panajachel
5. Vendedores ambulantes
6. Limpiabotas
7. Buscadores de belleza
8. Arco iris sobre el lago
9. Casos policiales del Lago Atitlán I (por Andrés Alonso)


 

ERA SEGUNDA

CICLO SEGUNDO




FASE III: CRÓNICAS SOCIALES

de Jesús Miravalles







ACLARACIÓN NO DECLARADA

Emilio González Morales
Tanto “La llegada de los turistas y el fin de las leyendas” como “Caso policial del lago Atitlán I”, primera y última de estas “Crónicas sociales”, son los únicos textos que no fueron escritos por Jesús Miravalles. Él los encontró en uno de los cuadernos de Andrés Alonso, un ex sacerdote que vivió en varios pueblos de la orilla hasta los años noventa, primero trabajando el cuero y en sus últimos años muy interesado en encontrar terapias a través de los sueños. Más adelante, en este blog, publicaremos otros ensayos de este autor, precisamente aquellos que más influyeron en la visión y la perspectiva de Jesús Miravalles sobre la cultura maya en general y las leyendas del lago Atitlán en particular.

Emilio González Morales
Andrés Alonso escribió “Caso policial del lago Atitlán I” en Jaibalito, una aldea cercana a Panajachel. “La llegada de los turistas y el fin de las leyendas” es un artículo periodístico que Andrés Alonso escribió después de una visita a San Pedro en los primeros años de este siglo y que su muerte dejó inédito. Al final de este texto, Jesús Miravalles añadió los dos últimos párrafos como un comentario para sí mismo.










 



1. LA LLEGADA DE LOS TURISTAS Y EL FIN DE LAS LEYENDAS


(por Andrés Alonso)


San Pedro La Laguna 1941
Antes de la llegada de los turistas al Lago Atitlán, los pueblos de la orilla permanecían aislados, encallados, como dormidos o instalados en un modo de vida pre industrial que ahora nos puede parecer bucólico. Las casas eran de adobe con techo de paja. Los hombres y las mujeres, trabajaban de sol a sol en la tierra, el lago, los mercados, las fincas o los transportes incipientes. No se escuchaban todavía sonidos de motor ni otros idiomas que no fuesen los mayas o el castilla. Hasta hace poco, quizá hasta la llegada de la guerra, deambulaban los nahuales por todas partes, haciéndose dueños de lugares, almas, sueños y mentes. Todavía se veían ancianos vendiendo petates, esteras, cestos y sombreros hechos de tul que en la actualidad escasea y no se trabaja. Por los senderos y callejuelas de los pueblos te podías cruzar con una serpiente, viva o muerta, varada en medio del camino. Podías encontrar venados en los volcanes, caballos recorriendo las calles sin cargar turistas, tacuasines, gallos, perros campaban a sus anchas. En las noches cerradas no era extraño toparse con la Llorona, el Maximón, la comitiva de los Ahogados y después de las fiestas las calles empinadas aparecían llenas de bolos dormidos, bueno, esos todavía siguen por ahí. 
Procesión 1941
Nadie construía casas en la orilla del lago, eso son ocurrencias de los primeros turistas que se fueron quedando hasta que una subida de las aguas venga a desbordarles o desplazarles en busca de otro paraíso perdido. Donde ahora hay restaurantes, hoteles, ciber cafés, lavanderías y tiendas para turistas, antes había cafetales, prados, playas, senderos y pequeños bosques con milpas llenas de basura. No se conocían las drogas sintéticas pero se cultivaba marihuana por los volcanes, en los patios de las casas o en las orillas del lago.

Iglesia de San Pedro 1941
Excepto la católica, todavía no habían comenzado a proliferar las iglesias evangélicas, tampoco los bancos ni la policía, lo que convertía a los pueblos del lago en lugares idílicos para la continuación del sueño hippie interrumpido o desvelado ya en Europa y USA. Ese fue quizá el primer efecto llamada para el turismo.


Niñas de San Pedro 1941
Simultáneamente, las gentes del lago estaban saliendo de la resaca de una guerra que afectó mucho más de lo que se podía admitir. Sin embargo, al ser los mayas,
durante toda la historia, mayoría abrumadora en los pueblos del lago Atitlán, su exclusión nunca pudo ser tan grave y extrema como lo fue en el resto del país. Eso explica en parte su fácil y pronta adaptación al capitalismo, pues al haber muchos pequeños propietarios y ser emprendedores pudieron aprovechar las nuevas oportunidades que se presentaban. Por otro lado, la falta de alternativas económicas a la economía de subsistencia y al café, es suficiente para explicar la pronta aceptación del turismo, que en diez años pasó de imagen exótica, vista a veces con prevención, a convertirse en paisaje característico y articulador de la vida económica y social del lago Atitlán.

Procesión 1941
Pero al mismo tiempo que crecía el turismo, como una señal de que el mundo llegaba al lago o de que el lago se abría al mundo, como otra secuela de la guerra contrainsurgente, crecía el número, el poder y los adeptos de las iglesias protestantes. Estas confesiones, como en su momento la católica, con un proselitismo minucioso e inconfesable, han ido alejando a las comunidades y líderes indígenas de sus propias problemáticas, precisamente aquellas que conformaron la base de la guerra: la desigualdad, la falta de acceso a recursos como tierra, trabajo, vivienda, educación, salud, reconocimiento de territorios ancestrales, formas de justicia y gobierno como pueblos, entre otros derechos en parte reconocidos en la constitución y los acuerdos de paz. Pero ni el estado guatemalteco ha cumplido las condiciones que firmó para una paz firme y duradera, ni el desarrollo económico ha traído la creación de un estado social, y no sólo porque el sistema esté corrupto, sino porque la corrupción es el sistema. Así es como las comunidades indígenas, de apocalípticas han pasado a ser integradas, y ahora con la globalización, pueden ver el fin de su historia cultural.


Ancianos 1941
Esta es la gran paradoja que envuelve actualmente el lago Atitilán: primero la llegada de la luz eléctrica, después la de los turistas, por último la de las religiones, los cambios se suceden y se desbocan: lo legendario se vende en rutas, los incultos se ocultan en cultos, los políticos en la resignación de un pueblo desorientado. A juicio de los ancianos, las mentalidades van quedando huérfanas, sin referencias, sin Dueños (Ajaw) conciliadores que sean también guías de la colectividad. Al perderse, olvidarse o ignorarse las historias que explican las costumbres se pierde la capacidad que estas tenían de adaptarse y armonizar con el presente. Las viejas leyendas que llevaban cifrados consejos de generación en generación han ido perdiendo su vigencia en una cultura que ha dejado de ser autosuficiente y comunitaria. Ya ni los sueños sirven para curar. Nadie puede oponerse a los cambios, es cierto, y muchos pueden ser positivos (apertura al mundo, nuevas posibilidades) pero si no se quieren perder muchos conocimientos y equilibrios, es urgente adaptar, deconstruir, generar, vivificar valores basados en la filosofía maya y en la ciencia, que sean capaces de generar un enriquecimiento de la cultura más allá de sus manifestaciones externas. 
JRC: "Mi rincón favorito del lago"
 (Añadido de Jesús Miravalles)

Resumiendo y concluyendo, la luz eléctrica llegó al final de los años setenta y los turistas no comenzaron a hacerse notar hasta los noventa, pero en ese intervalo, entre la llegada de la luz eléctrica y la de los turistas (dos eventos en principio positivos), algo se perdió: se espantaron los espantos, se esfumaron los nahuales, se difuminaron los espíritus y poco a poco, se fueron desvaneciendo las viejas leyendas que contaban los Antiguos y ya sólo conocen algunos Ancianos. De modo que, por pura prevención, sería bueno registrar sus saberes en cualquier soporte antes de que nos quedemos huérfanos de comunidad y definitivamente a la intemperie del capitalismo.

...Ahora, después de haber pasado aquí varios años, con sus días y noches, sé que los turistas no saben nada: fue la luz eléctrica quien arrebató la magia al lago Atitlán, porque sólo el firmamento estrellado visto en su máximo esplendor, puede derramar los espíritus, las fuerzas, los entes y energías que pueblan la oscuridad de la noche, se encarnan en mitos o leyendas y se consultan en calendarios.

...PRÓXIMAMENTE... 
...CONTINUARÁ...
Jorge Ruiz Cuesta: "Despertar soñando"


 ÍNDICE

ERA SEGUNDA
CICLO SEGUNDO: "ESCRITOS PÓSTUMOS" 
de Jesús Miravalles 

FASE III
CRÓNICAS SOCIALES
1. La llegada de los turistas y el fin de las leyendas (por Andrés Alonso)
2. La nueva administración de las aguas
3. La aparición de los tuc tuc
4. Fotografías de un domingo en Panajachel
5. Vendedores ambulantes
6. Limpiabotas
7. Buscadores de belleza
8. Arco iris sobre el lago
9. Casos policiales del Lago Atitlán I (por Andrés Alonso)


FASE IV
CRÓNICAS SOCIALES II
MANDAMIENTOS DE OFICIOS DEL LAGO ATITLÁN
1. Mandamientos del lanchero
2. Mandamientos del tuctuquero
3. Mandamientos del chofer de autobús
4. Mandamientos del ayudante de chofer
5. Mandamientos del Perito Contador


FASE V
DESCARTES DE “DESPERTAR SOÑANDO" de Jesús Miravalles
(Leyendas en Lancha)
Leyenda de Xe K´istilin
Leyenda de Xk´apoc
Origen de los terremotos en Guatemala
Historia de San Lucas Tolimán
Leyenda de los Pato Poc
Profecías modernas de los Antiguos


FASE VI  
EXTRACTOS DEL DIARIO DE UN VIAJERO
CRÓNICAS DE LAS CPR
1. HISTORIA EN TRES TIEMPOS DE UNA GUERRILLERA IXIL
Tiempo Primero: Las bases mayas
Tiempo Segundo: La historia personal
Tiempo Tercero: La mujer y la política



ERA SEGUNDA


CICLO TERCERO
“ARTE MAYA CONTEMPORÁNEO”


FASE I
"PINTURA Y PINTORES DEL LAGO ATITLÁN"
INTRODUCCIÓN
LA EVOLUCIÓN DE LA PINTURA DE:
Diego Isaías Hernández Méndez
Emilio González Morales


FASE II
"ARTE MAYA CONTEMPORÁNEO: MUJERES QUE PINTAN"
FOCO TZ'UTUJIL: SAN PEDRO LA LAGUNA
Vicenta Puzul de González
María Teodora Méndez de González

FOCO KAQCHIKEL: SAN JUAN COMALAPA
María Elena Curruchiche
Paula Nicho Cúmez






JORGE RUIZ CUESTA

http://i.creativecommons.org/l/by-nc-nd/3.0/nl/88x31.png
DESPERTAR SOÑANDO. S.A.
Atitlán,
Cerca del agua.

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